Imagen cogida de la red
JUEGOS
Frente a la antesala de los
silencios, deja esa fiera del nosotros: larga
cueva que el viento hace en los
litorales.
Deja las estelas o los sudarios
de la cárcel, las esquinas de la táctica
y el despojo, esa historia con
descaro que siempre nos cuentan los analistas:
todo es un juego de cansancios.
Deshace el extravío del nosotros,
mientras sigamos descalzos en la penumbra.
Nadie velará nuestro cadáver,
mientras sigan los tropezones en ayunas.
Esto de los relevos políticos, no
deja de ser mero supositorio.
Barataria, 06.VII.2014
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