miércoles, 29 de enero de 2020

NINGÚN ITINERARIO

Imagen FB de Pere Bessó





NINGÚN ITINERARIO




El horizonte huye suicidándose dentro de nosotros: es inexorable el misal de los agujeros y la nodriza de abismos que nos asiste. Sobre la piedra impasible del tiempo, la mutilación brusca del aliento en las cornisas. Ningún itinerario es depósito absoluto de nuestros imaginarios: la lengua siempre sangra en ese juego macabro de la impaciencia. Siempre nos apiñamos en la gotita de quimera que cuelga del árbol de las paradojas.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


lunes, 27 de enero de 2020

POLVO RESPIRADO

Imagen Pintyerest





POLVO RESPIRADO




Como cualquier cosa que cae en los ojos, arde la esquirla del pretérito y su racimo de recuerdos. Cada gota de agua llovida es una menuda humedad en las sienes, acaso un espejo sordo, saturado de imágenes insomnes. Al borde del hueso de la miseria, el lado perverso de la realidad: en aquella pobreza de pañales, los cuentos irreales copados de suciedad. Y ningún analgésico para soportar las calles o las paredes de madera de las palabras.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


viernes, 24 de enero de 2020

SOLO CAMINAR NOS QUEDA

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SOLO CAMINAR NOS QUEDA




Caminar y caminar, es lo que nos queda, mientras haya fuego: no hay días que nos esperen en cada jornada, sino la memoria entre tanto escombro. Nada es cierto ya, salvo la tinta de las palabras en los encajes de las luciérnagas, o aquella migaja de horizonte a punto de convertirse en pájaro. Ajenos ya al dolor, retornamos a la diafanidad de la infancia.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


miércoles, 22 de enero de 2020

NOCHE HONDA

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NOCHE HONDA




El pus del tiempo bulle hasta en los manuales de urbanidad.
De los jardines solo el rastrojo de los aullidos, después la losa
fría y la ropa a la deriva de los dientes.
¿En qué piel o pecho la tierra no se seca,
ni huye de los párpados?
Es honda la noche y apenas avanzan sus escamas. Es distante
el minuto del sueño, la rosa fundida en la sangre.
En un mundo de mendicidad, dejan de escucharse los gritos.
Allá, apenas llega el tropel de la tormenta, salvo que sea ficticia.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga

martes, 21 de enero de 2020

FORMAS DEL HORIZONTE

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FORMAS DEL HORIZONTE




Sobre el polvo de las palabras, el desagüe abisal de la armonía y sus astros de piedra caliza. (Aquí nos envuelven los escombros como en aquellas calles del west far.)

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga

lunes, 20 de enero de 2020

QUIZÁS NOS AHOGUEMOS

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QUIZÁS NOS AHOGUEMOS




Quizás nos ahoguemos en el rasguño de las aguas que emergen de los ojos: en el pecho, las pupilas heridas del grito, o la carcajada de sal que nos muerde mientras la espina clava el sollozo en el tórax. Nos urge un caballo de hierro para montar esta sombra agria con la más abierta dureza de las determinaciones. (En la concavidad del pecho siempre golpea lo remoto, ese predio extraño del vacío que tienen los espejismos. Después de todo, respiran los recuerdos en un país extraño. En un país de muchas sospechas y ansiedades.)

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga

domingo, 19 de enero de 2020

AQUÍ SIEMPRE LAS CALLES

©Pintura de artyar.ru





AQUÍ SIEMPRE LAS CALLES




Aquí siempre las calles y sus lejanas armonías: en cada travesía hay borrosos cipreses como una eternidad de soledades que ha tallado el aliento. Nosotros, ciegos de infinito, hemos empapado de coágulos la travesía y entendido que el destino tiene su propia mística: peregrinar, acaso, en el viento del absoluto. A veces la luz se fuga del alma para hacernos comprender la noche, la noche que nos oculta en los jardines del sueño. Supongo que en la última piedra que atisbamos, advertimos la trascendencia de la Esperanza.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga
©Pintura de artyar.ru

viernes, 17 de enero de 2020

CLAMOR EN TIERRA

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CLAMOR EN TIERRA




Un silencio de paredes clama como un cuchillo de olvidos.
Solo hay carencia de palabras en el corazón deshabitado del país.
Los atrios se extienden ciegos en algún rastrojo suicida de pájaros,
mientras una lágrima afirma la pobreza,
en esta tierra de abandonos que únicamente quiere ser olvido.
En alguna esquina, los mástiles de agua, niegan los relámpagos.
Ronquidos de sangre circuncidan máscaras de sonrisas,
amuletos sin ojos cuelgan del imaginario que suspira frente
a las telarañas de la brizna.
Desde la tierra de la exasperación, la trama de una orfandad
de ventanas. (Aquí la caverna busca la leyenda secreta mi alma.)

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


miércoles, 15 de enero de 2020

ENIGMA DE LA CONTEMPLACIÓN

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ENIGMA DE LA CONTEMPLACIÓN




Entre las verjas de niebla veo los cementerios atardecidos de los jardines. Es un mar gris que se confunde con la lejanía. Desmayan las relojerías en cada palabra, la soledad que juega con los viejos balcones de la infancia, la sal hasta el cuello con cierto cinismo. Callo frente a la dureza. Aquí duelen los caballos perennes del tiempo y, a su vez, la transitoriedad de la madera. Todo lo que nombramos y deja su huella como un dulce arpón en el pecho.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


domingo, 12 de enero de 2020

INDAGACIÓN EN LA CAVERNA

©Pintura de Nicolas de Staël, 
El parque de Sceaux, 1952






INDAGACIÓN EN LA CAVERNA




En el mismo sitio de la caverna, el fermento de la madrugada.
En dicho claustro el cruce de sueños como un cántaro dolorido;
sube la palabra y desvela su hipnosis y la hoja de supersticiones,
y la sucesión de infusiones del tiempo.
En un tecomate de invisibles espejos de agua, baja al submundo
lo profano, las ramas negras del aliento, los pájaros amoratados
de un largo cansancio. Las auroras extrañas en vísperas
de cerrar los ojos. Todos los pecados juntos, sin zapatos.
Un trueno de moho, es arrojado a la vida. Es recurrente la materia
rota de todo el fragor debajo de los pies,
de todas las afonías que desviven en el féretro.
Pero aquí me quedo, casi inmutable, en el corazón de la noche.
Indago en el viejo testamento de la tormenta: todo va más allá
del ahogo oscuro que nos propicia la luz o el desamparo.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga
©Pintura de Nicolas de Staël, El parque de Sceaux, 1952

miércoles, 8 de enero de 2020

LENTAS TUMBAS

Imagen Pinterest





LENTAS TUMBAS




Vivimos a empujones en la sed muerta de la savia.
El cuento es otro, ahí, cuando se entra a la profundidad de la fosa.
Nosotros, hijos de la llaga, no tenemos más que una corona
de escarabajos: abrimos las ventanas del moho mientras cruzamos
la ebriedad convulsa del escombro.
Debajo de los árboles se pudren nuestros ojos.
Somos el zumo del bagazo de una gota de sol prendida
en las colillas: sangra el pez en la sartén del tufo y olemos
las calles  que nos muerden el pulso. Se nos hace nudo la garganta.
Se nos hacen callos en los pies, mientras escupimos los güishtes
que nos deja la lluvia de la historia.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga

lunes, 6 de enero de 2020

AÚN HAY GRIETAS

©Pintura de Helen Frankenthaler





AÚN HAY GRIETAS




Mientras continúan los cementerios con su ojo de azadón, el pecho se abre hasta arder en su delicia de féretro. Ante la noche, la cara de la piedra y los derivados éteres del subsuelo. También esta suerte de lento crucifijo como un astro al pie de mis ojos. Alrededor de los caballos del llanto, el amuleto de la almohada como un pájaro. (Hay grietas en el cardumen del desierto de aquella virginidad que aun golpea.)

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Helen Frankenthaler

sábado, 4 de enero de 2020

PASEO AMOROSO

Imagen de la red





PASEO AMOROSO




Camino por estas calles donde cada vez es más notoria tu ausencia: aquí se rompen los jardines sin volverse a restaurar. Siempre hay excusas para no limpiar la ciudad, ni los jardines. Hoy, ya no sé si existen otros lugares mejores que éste: en cada esquina una flor en abandono y residuos agonizantes sobre la memoria. En este país hay una romería de miserias y olvidos. Uno sale a caminar entre las impurezas y el miedo, fundidos en el letargo de un tráfico de huesos o mutilado de trenes. Uno ama y odia a este país. Ama y odia este infierno desmedido. Uno ama y odia la tristeza, el crimen, los cementerios. Uno ama y odia esta pocilga de la noche.

Del libro: Precariedades, 2020
©André Cruchaga


jueves, 2 de enero de 2020

AL RAS DE LA BOCA

©Pintura de Richard Diebenkorn





AL RAS DE LA BOCA




Salvo aquellos peces embalsamados en los armarios del sexo,
todo es aullido en los ataúdes del zodíaco.
Una linterna de vómitos derrama reinos indecisos de moscas.
Muerden los rieles de la fuga en la estación de cuarto menguante
de la cópula aviesa de este reino.
Ante tanta ausencia sórdida, lo incierto de las premociones
y su vasta lujuria de andamios de piedra y su boca de viejo burdel
y su hueco de enterrada perversidad y su espejo de polvo.
Al ras de la boca, la ropa desmedida de las imprecisiones.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Richard Diebenkorn

miércoles, 1 de enero de 2020

RÉGIMEN NOCTURNO

Imagen Pinterest





RÉGIMEN NOCTURNO




Porque el día se deshace en el rito de las dudas y las oscuridades que propaga el horizonte. Hay desencuentros en el nudo negro de la noche: nos abandona la luz y es una pesadilla el ultraje, los pocillos de sal en la boca, la piel que vocifera solitaria. Frente al torbellino de las inclemencias, ninguna serenidad, salvo el designio de las sombras y la tierra donde transita la muerte. Vivir, acaso sea, este reclamarle a la memoria por el fuego de algunos sueños. Tiembla el pulso en la noche recurrente de la almohada.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga