jueves, 31 de octubre de 2013

CRUJIDO

Imagen cogida del FB de Camelia Iuliana Radu




CRUJIDO




Ante el crujido inconfeso, la brisa ahonda su lengua en la ceniza.
—Parto junto al ascua de los relámpagos y le confiero invulnerabilidad
a mi garganta. (Cuando se ha vivido de sobra en la intemperie no importan
los pómulos desangrados, ni la lengua reseca de los guijarros.)
Sangra entonces el delirio en su fuga.
Frontal, sin tullimientos, aprieto con mis manos lo que aún pervive:
la piedra que gana la batalla, el filo del candil que trasciende la luz,
en estos mismos huesos roídos por las púas de la plegaria o la sal.
Ya alta la noche y desencadenada, el alarido de los objetos subterráneos.

Barataria, 30.X.2013

miércoles, 30 de octubre de 2013

ESTACIÓN

Salt Lake City-Imagen de André Cruchaga




ESTACIÓN




¿Quién dijo que las estaciones no roen el aliento? Siempre hay algo
que se va o se restaña como la vieja camisa de las sombras.
La espera tiene semanas irrevocables, (siempre el vaho al pie del trajín);
los años anónimos bajo la tormenta hacen lo suyo:
púas audibles trascienden la mensajería pedregosa del combate.
Espero. Los zapatos dilatan las pupilas,
mientras los caminos se entumecen en el rescoldo.
—Ya veré en qué entraña respira la conciencia, en qué costado se hunde
el sofoco de la yesca que apenas amanece.
Yo aquí, disidente de los golpes, al espejismo otrora de los espejos…

Barataria, 29.X.2013

martes, 29 de octubre de 2013

DEBAJO DE LOS ANDENES

Imagen cogida de la red





DEBAJO DE LOS ANDENES




Debajo de los andenes imagino fosas y espejismos de otra edad.
En realidad nunca fue imposible entender la náusea que dan los vestigios.
En mis otras edades siempre hubo verdugos y  murciélagos colgados
del peñasco del calendario:
debajo de los guijarros, las sábanas insomnes de un oleaje imposible.
Desemboco en la doctrina de las aguas, las palabras entrañables y ese echar
fósiles al plato de comida.
Allí en la desnudez, quizá, ya sólo hayan muecas y escombros…
Barataria, 28.X.2013

lunes, 28 de octubre de 2013

ESFINGE

Imagen cogida de la red




ESFINGE




Aquello era como una esfinge: velaba como una sombra mis barcas.
Entre las aguas, el mundo subterráneo de la anatomía, el vuelo del designio
inalcanzable, el ala falsa de la inocencia,
el abanico de la malicia en el cuenco de las manos.
—Así, la mitad de la noche, como una brasa urdiendo quemaduras:
(Siempre da escalofrío la metamorfosis de uno atrapada en la garganta.)
¿Hasta cuándo las bocanadas de respiración en los telares de la muerte?
Supongo que es lluvia esta sustancia que revela el cortinaje de la sal:
soy sólo rehén
de estos párpados ramificados en ala negra. En el sinfín se desfonda el azúcar.

Barataria, 27.X.2013

domingo, 27 de octubre de 2013

COMPUERTAS

Imagen cogida de la red




COMPUERTAS




La plena lluvia, bajo el resplandor de los relámpagos.
Abiertas las compuertas
del incendio: quizás una sombra o los recuerdos hagan lo suyo.
Destrocé el rocío en fragmentos diminutos, rompí el ojo y todos los rituales
de la expiación, (nunca fue paraíso la caverna),
ni el delirio una semilla revelada.
El vértigo fue la única extensión del agua corrida; siempre fue primero
la sal y su fosa,
siempre las trampas escarbando en los poros, al acecho el plato y sus conjuros
y la trastienda honda de lo infranqueable.
Un día, simplemente, dejé de ser rehén de los guijarros…

Barataria, 26.X.2013

sábado, 26 de octubre de 2013

RICTUS

Imagen cogida del FB de Alexe Rau




RICTUS




A veces nos toca, como una ecuación hostil, fruncir el ceño y engarzarlo
al rictus petrificado del ahogo donde aúlla redondo el desequilibrio.
Existe el rictus de la vida y el de la muerte: en ambos el tránsito de la materia,
las formas y vacíos del aire,
la redondez de una hoja cercana a la lágrima,
Diógenes multiplicado en la sed, la boca en los panes repartidos.
(Más allá del suplicio de los ecos, el ensueño es un desliz de lejanías,
otra forma —quizá— de la huida del tiempo y sus devaneos.)
Ante la realidad del sendero, la metamorfosis necesaria del pájaro:
¿es mueca, acaso, subir y bajar las escaleras del árbol sin la buena salud
del conjuro? —Respiro ante el avío de las estaciones…

Barataria, 25.X.2013

viernes, 25 de octubre de 2013

HORAS

 Pintura de Mosè Bianchi, cogida del FB de Pittori Italiani dell'Ottocento





HORAS




Son nada las horas que imaginamos en el pantano. Los pensamientos
en el muladar y esta suerte de intentar cada día ser agua limpia.
—En realidad, ya no sé si es el Paraíso o el Infierno, todo el horizonte
abigarrado por la tristeza, todos los colibríes disecados del destello.
A menudo las horas se pudren en el paroxismo, envilecen los ahogos
arrepentidos,
y las sombras con sus vacíos.
¿En qué presente desembocan los arcanos, esta chatarra de mis pulsiones?
¿Qué ardores colmarán de nuevo el hambre? —Sigo la marcha
por si emerge la desnudez de los ojos frente a la ventana. (Aunque seguir,
sea otra forma, de repartir lo derramado.)

Barataria, 23.X.2013

jueves, 24 de octubre de 2013

TARDE

Imagen cogida de la red




TARDE




Esta claridad apenas adentro de todas las siegas del aliento.
En las aceras y calles se pierde el sentido del pan: corro tras los juegos
del tiempo y sus reveses.
Cada vez las palabras se fugan. Se fugan las palabras y bosteza la culpa
de todas las inclemencias. Se fugan los espejos y subasta la tinta.
(Algo deja de ser después de todo en los sinsentidos, en la voz errante
de los tiempos.) —¿De quién es la culpa que no hallan botellas en altamar,
ni trenes de regreso en las estaciones recorridas?
—Muerdo las credenciales de mi vigilia, de pie frente a la lluvia,
busco un notario…

Barataria, 22.X.2013

miércoles, 23 de octubre de 2013

A VECES LA LUZ

Imagen cogida de Pittori Italiani dell'Ottocento




A VECES LA LUZ




A veces la luz viene deslucida de tiempo. Aún, así, reseño la sombra
de los andamios, sé que bulle en los pulmones la faena de la muerte.
(Hay una verdad que escapa a toda voluntad: anochecemos en las gárgaras
de los recuerdos;  aquí, cambiando cada vez las cortinas de las ventanas.)
Siempre será recuerdo el estertor de la ropa,
y todo aquel vencimiento prematuro de la alegría. y todas las puertas
malogradas y todo el sentido de los caminos.
A veces la luz es sólo esa frontera entre las fotografías y las paredes.
(Ya lo dice el tizne cuando la madera se consume), en la carne doliente
de las pesadillas.
A veces la luz, florece tardíamente en los sueños…

Barataria, 22.X.2013

martes, 22 de octubre de 2013

ROTACIÓN

Imagen cogida de la red




ROTACIÓN




Nos movemos en ese sinfín de rotaciones que dan las aceras en su órbita
de nostalgia. —Acaso nunca recobremos el vuelo. La mueca o el gesto
serán una especie de estandarte a la hora de la siega del ojo en el fósil
del despojo. (Existen horas sólo para las hurtadillas),
y suicidios y cascos que nunca tuvieron respuesta, salvo la lluvia
calló al viejo clavicordio de la hojarasca movida por el viento.
¿Puede perseverar el rostro ante tanta indefensión? (El vacío y la carcoma
son por hoy, la única munición que acompaña en el camino.)
—Todo tiempo acaba en la respiración que lo habita.
El ruido es más potente que un taller de carpintería: no hay audacia
que deseche o aleje, los fangos de saliva en las retinas…

Barataria, 21.X.2013

lunes, 21 de octubre de 2013

PIEDRAS

Imagen cogida de la red




PIEDRAS




los árboles inmóviles
abrazan fuertemente la sombra que los sostiene.
PAUL  ÉLUARD




¿sirve para algo morder los calcañales el lado oscuro de la piedra que sirve de lecho el ruido de la puerta fregado por las manos aquella siempre puesta de sol sobre el cerro? camino adentro del río se ahogan los pájaros calles aquélla manchada por el semen inerte de los techos aquella que tiembla en los ijares pegada al muro de la espera del primer claror de los gallos aunque haya luz existe cierta oscuridad en las faenas pronto se ha secado el andamio de los sueños pese a que la cosecha de los pies nunca acaba nunca deja de ser arado el venir o ir arder en un instante en torno a la resucitación en los años venideros allí no habrá campanas por más que se escarbe en la brasa o se mueva el badajo del calendario —pierdo y pierdes echando ceniza al presente debajo de las bóvedas la andanza del cuervo el búho a deshora del sofoco los ásperos grises de la feligresía acostumbrada a los atrios con fetiches ¿quién sale ileso de los poyetones y el tizne? ¿quién compra  en el merca do de pulgas la alegría la clientela el aire la esperanza? entonces uno deja de ser servil ante los azadones —mirad la cosecha que nos trae el trajín del vinagre la mercancía del sexo temprano y su secuela piromaníaca: a veces todo es sombras el ciprés vencido del olfato el gajo de trementina en desbandada vos que hojeas el revoltijo de letras junto al viejo crucifijo que alumbra —dices— tus penas siempre me ha gustado caminar en medio del mal tiempo: sé que para alguien uno nunca es santo de devoción da igual cuando ya uno ha recorrido largo trecho siempre oigo al viento cuando aprieta mi pecho después de todo siempre ando en cercanía ahora más cuando piedra y luz son cárdenas claro que el mundo es implacable la gente es implacable salvo excepciones uno vive con el miedo a flor de piel desde luego no son nuevos estos altares ni el hisopo que quema las encías ni los estragos que dejan los calores furtivos: uno termina por llenarse de imágenes y sombras a veces hay necesidad de ponerle pespuntes a los pulmones y untar azucarada a los ojales de la ignominia la herida como las palabras son entrañables: entrañable la siembra y el hallazgo de fósiles en cualquier parte el ojo se extingue en la noche pero aún conservo mi ternura pese a los despojos trato de salvarme de las asperezas y de las piedras del momento ningún paraíso es reloj de pétalos sino un lugar apocalíptico donde abundan ecos corroídos y valijas con oscuros trapos (hoy lo entiendo cuando también mis entrañas están a punto de emigrar) mientras respiro lo insoportable reconstruyo la almohada con todos los  disfraces: cuando deje de estar aquí pensaré en otras introspecciones tengo hambre de piedras para soportar otro siglo…

Barataria, 20.X.2013

domingo, 20 de octubre de 2013

CERCA DE GRISES

Igor Khaikov (Игорь Хайков), Russia




CERCA DE GRISES




Como un recuerdo olvidado, estos grises que trabajan en el vacío.
Sobre los tantos años desconfiados, me doy cuenta que no hay ignorancia
menesterosa,  sino dientes que se hunden en las calles.
En el repertorio de los misales, los diminutos fraudes al pulimento:
en la historia de las campanas también existe la decrepitud;
—nazco para hundirme en la trampa de los horarios, vivo para saber
qué leyes gobiernan los injertos
y los hangares voraces de la intemperie y la horda de la pobreza.
(Desveladas mis torpezas, cualquier frivolidad se torna impune. Vulnerado
el aliento, nada queda por escribir en las pizarras.)
Barataria, 19.X.2013

sábado, 19 de octubre de 2013

VENTANA

Imagen de André Cruchaga




VENTANA




Desde aquí crepita el arado de las estrellas, y aquellos techos de la tarde.
La densidad es increíble cuando todo está destinado a los ojos.
—(En las ojeras las certezas son más profundas, aprieta el desvelo
de los acantilados, y los dedos convocados por el viento.)
Para que muera mi pecho
las paredes de adobe del horizonte hacen lo suyo: acogen en pedazos
el pálpito. (Luego las alambradas de la neblina como libros cerrados.)
Desde aquí, pues, las nubes disfrazadas de pájaros,
y el polvillo del calendario en transitorias osamentas.
A la distancia, alguien seguramente filma su propia película y ríe de estupor
mordiendo sus ingles…(Creo que la vehemencia nunca ha sido multicolor
por más ímpetu o impulsividad de la demencia.)

Barataria, 18.X.2013

viernes, 18 de octubre de 2013

CATRE

Imagen cogida de madrigaln.blogspot.com




CATRE




Allá en la esquina voraz de las paredes, la cama estrecha de la noche
desierta. A la sábana, toda la erosión de los sentidos, (las palabras
 irremediables) quizá los viejos resortes desplomados. El techo quemado
por el polvo, las tejas como una romería indefinible.
(Muge el moho en medio de la garganta, supuran los escarabajos
su metabolismo nefasto, corre la utopía a través de la tinta.)
—No cabes en esta estrechez de animal ponzoñoso,
ni puedes alterar el bagazo de la niebla: duermo entre extraños güishtes,
y me arropo con el nudo de las ausencias.
Mañana quitaré todo el ajuate quemado en mi cuerpo.
De seguro vendrán días mejores para llenar el cántaro hasta que rebalse.

Barataria, 17.X.2013

jueves, 17 de octubre de 2013

CARCOMA

Imagen cogida de la red




CARCOMA




Roes la madera hasta socavar los cuartones de la casa. En vano tu polvillo
mortífero. En vano los angostos hilos del andamio y el rescoldo.
(No hay mucha diferencia entre tu sombra y la herrumbre.)
Jamás creo que la hubo, excepto que yo no lo sabía.
—Nada es perenne en los juegos sucios de ciertas humedades: sobre el desván
no existe memoria sagrada,
sino un cojín de tenebrosas imágenes.
(No toda luz es fuego de luciérnagas por más que se le quiera conferir
misterio a lo inmóvil.) —Supe que en el hervor de luna nueva,
ninguna semilla da fruto bueno,
es como si de pronto la claridad perdiera su esplendor de pulso insoslayable.

Barataria, 17.X.2013

miércoles, 16 de octubre de 2013

CALLE

Pintura de Walter Frederick Osborne




CALLE




Casi en trance bajo a través de los espacios deshabitados. Calles, después,
sólo habitadas por mi memoria: —usted, seguramente no recuerda
todos los escombros que transitamos para estar aquí, en un destello
de luz. (Usted que nunca vio estos paisajes trémulos),
pero que ahora son parte del aliento y del siempre atardecer de la ropa.
Estas calles así, —casi enfermas— son bellas: parecen meditadas
e introspectivas; se resisten a lo multitudinario porque son parte de los folios
del deslumbramiento, de esa otra fantasía que consagra el tiempo.
Sobre la piedra que conduce el abecedario, cava sus actos clandestinos
el tiempo, faena también a raudales de las semillas.

Barataria, 16.X.2013

martes, 15 de octubre de 2013

CABECEO

Sin título




CABECEO




A menudo ha sido ventarrón el cabeceo de vocales, 
la hostia germinal del tiempo, la espiga desvivida 
sobre la piedra, la flor que retuvo el olfato. 
(De pronto, creo, más allá de las nociones, que las palabras 
nos dicen todo: Góngora o Quevedo, el antifaz de las ventanas, 
la colilla desecha en la miel de las confiterías; 
en la superficie del techo, la fontanería del invierno, 
gotas de aire enroscadas en el arco iris, el esplendor sacudiendo
la hojarasca. De pronto, también, la noche, las albardas, 
el taburete de la roca, tienen noción de viento, 
murmullo de martillos en el pecho. El viento es así, 
un visitante extraño, mímesis de embudos, 
escalera pulsante en el entrecejo. Velo el pezón sobre el libro.)
Desde siempre desenreda el yute del horizonte, limpia el tacto 
de fermentos. Hay, luego, 
otro tipo de nociones como la incandescencia de la realidad 
sobre espejos, la pasión incontrolada por los suburbios, 
el río de leche de la memoria rompiendo el dique de los recuerdos 
y ciertas malezas que empañan las palabras. 


Barataria, 15.X.2013

lunes, 14 de octubre de 2013

DIGRESIÓN

Imagen cogida de la red




DIGRESIÓN




Cuando camino pienso en el esqueleto de todos los armarios:
en el fuego de los costados, o en la breve anatomía de las libélulas.
Cuando toco la arcilla de las nubes, la tierra parece inhóspita
como la cuchara dudosa del azúcar.
Con mi paraguas confundido de agua, el paisaje se vuelve una pinza
de un mundo sin puertas.
(Odio deliberadamente mis ojos de ciego, los gestos de los muñecos,
y el diccionario oscuro de las calles, el pan roto de las estrellas.)
Duelen tantas preguntas que uno termina por mentir: duelen en los ojos
los azacuanes y la voracidad del zumo que se desmaya en los párpados.
Después de todo, los sargazos son parte de la desnudez del trópico.

Barataria, 13.X.2013