martes, 31 de diciembre de 2019

SIEMPRE INTEMPERIE

Imagen de la red





SIEMPRE INTEMPERIE




Nunca dejamos de ser en el camino, intemperie: lluvias, neblinas, sombras, partidas. Siempre al ras del suelo la felicidad fenecida y esa desnudez de pecho aferrada al muro de la deriva. Con todo el no dormir la luz deja de aquietarse: insomne se eriza el fuego en los brazos, aunque ya todo haya expirado como el sueño que respira en la hoja que cae, lenta, en el sin fin del otoño. Mañana, tal vez, sobre la piedra del féretro, el adiós nos muerda con su último resplandor.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga

lunes, 30 de diciembre de 2019

ABSORCIÓN

Summerlake City Park, Beaverton, Oregon






ABSORCIÓN




Dos ojos se confunden sobre la maleza del bosque. Desde ese sitio vuelan pájaros leves que luego, en el hilo del respiro, se pierden en la humedad de las palabras. En cada esquina de los poros, el latido de sangre del sueño y la puerta de azúcar del océano y la llama densa del relámpago. En la lejanía gritan los féretros de la tarde y acaso, el destrozo al despertar de la embriaguez. (Cada quien huye después como el humo amargo de las colillas. Cada quien, perpetuamente deshabitado.)

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
Summerlake City Park, Beaverton, Oregon

domingo, 29 de diciembre de 2019

MUTILACIONES

©Pintura tomada de la página: “The World In Their Art”





MUTILACIONES




Nos duelen las puertas sajadas del cierzo y la desfiguración de cuanto nos rodea: el ojo, apenas, como un metal frío sobre el tórax y la garganta con su vena rota y tumefacta. Nunca fue fantasía la sintaxis de la rosa en medio de calles y jardines ahumados. Tampoco el gallo azul en aquellas madrugadas de Morris Ave. En cada acera íbamos socavando el sueño perenne de las estatuas. En la luz de los semáforos el volumen de los colores era la masa agónica de las postrimerías.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Pintura tomada de la página: “The World In Their Art”

sábado, 28 de diciembre de 2019

SOMBRAS DE LA BRUMA

© Pintura de Karen Darling






SOMBRAS DE LA BRUMA




Esta lucha de charcos extendida en las ojeras de la noche diurna,
mientras gruñe una hoja en solitario, la pluma de una lágrima;
una jerga de deseos busca su deidad en medio de la noche.
Aun tengo en mis haberes la costilla del pánico, el paladar hendido
de las semanas y el hábito de corromperme frente a los candiles.
Arde la hoguera líquidas de mi sangre, cada ladrido de la nostalgia,
el ala del eco en un grano de sal. La infamia y sus tatuajes.
En el atrio del maleficio se aguzan los brebajes del maleficio:
En la sombra del moho, el aliento brama sus propios muertos.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
© Pintura de Karen Darling







viernes, 27 de diciembre de 2019

ANDENES FALSOS

Tualatin Hills Nature Park, Beaverton, Oregon






ANDENES FALSOS




Sobre los altos velámenes de la fuga, la sangre totémica
de las frustraciones, y las confesiones a ultranza de la piel yerta.
A la luz de las geometrías incandescentes, el balido claustral
del follaje y sus insomnes paraguas.
Nada hay que decir ante la fuga de una serpiente de cobijas
en pleno fango, ni ante el pálido vómito de los rituales ahuecados
del hospicio oscuro del caos: girar los muertos como sueños
en medio de los falsos andenes de las depredaciones.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
Tualatin Hills Nature Park, Beaverton, Oregon

jueves, 26 de diciembre de 2019

ALBA DE LA MUERTE

Imagen Pinterest





ALBA DE LA MUERTE




Es triste el alba frente al ojo de la muerte: suena la madera como un barco quieto en la desnudez menguante de la luz. A ratos nos quema la boca seca del incienso, la piedra al cuello y el paisaje con montículos de escarmiento. Inerte el dardo de la opacidad en los encajes, espectral el pájaro que nos delata en la negra ofrenda del tiempo azaroso. En la deshora solo el juego del ansia con su furia de armadura.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga

martes, 24 de diciembre de 2019

ANTESALA DE LA CALLE

©Imagen Pinterest







ANTESALA DE LA CALLE




Sobrevivimos a los dientes furibundos del tiempo y al entumecimiento de las criptas: cada calle solo fue la antesala de ese círculo vicioso de lo real. Anduvimos en una placenta de transeúntes desaforados: anduvimos, sí, desnudos desde la infancia y ahí llovía con inocente luminosidad hasta que del chubasco, emergían los jardines y las alas, en fin, del incienso con su hacinamiento de ansiedades imprescriptibles. En Estherville, el bosque y el pecho envuelto en escalofríos y un hilo de pájaros en el exilio del país.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Imagen Pinterest

lunes, 23 de diciembre de 2019

GRITO DE LOS BRAZOS

© Pintura de Chiyomi Longo






GRITO DE LOS BRAZOS




Hay unos brazos desnudos que gritan en la ausencia, una forma de despojo entre las ramas: tirita la espesura a través de las ventanas del tórax, mientras me enredo  en las aguas frías de la solapa del misterio.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
© Pintura de Chiyomi Longo

domingo, 22 de diciembre de 2019

CONVULSIÓN POSTRERA

©Pintura de Yuko Wada





CONVULSIÓN POSTRERA




Todo el pecho se astilla en esta convulsión de arpa en el pecho. Ya hay cansancio en esta túnica de la espera, entre tantos nombres que nunca dejaron de hablar en el oído, entre tantos silencios que aprendieron a sangrar en el fervor de las semanas. Alguien salpicó de lágrimas el mundo de los brazos, el mundo que no existe salvo en el sufrimiento, el mundo que rompió con el poniente de los zapatos. Ahora, toco ya cerrada, la caja de luz y solo queda el sonido seco de las cosas. (La noche baja a la tierra mientras duermo en mi ignorancia.)

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Yuko Wada

sábado, 21 de diciembre de 2019

PEZ CIEGO

©Pintura de Franz Kline






PEZ CIEGO




Un pez de crepón sangra en el último candil, ciego, de la noche que se acerca al umbral. El musgo de riguroso amargo, pernocta en el pulso, y arde la sal que brota de los ojos. Y reviven las luciérnagas en medio de la neblina, al costado de la medianoche. Ahí el acuario como un imperio de sed para este ritual que enlaza providencia y adversidad. (La voz se me pierde entre las ramas del resfrío, igual que la luz arremolinada en el tizne, igual que la ceniza que transpiran las semanas.)

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Franz Kline


viernes, 20 de diciembre de 2019

NINGÚN CONTRAVENENO

Imagen FB de Pere Bessò






NINGÚN CONTRAVENENO




Sobre el cadáver incinerado de las agonías, las funerarias y su amordazada madera.  En la pira de la expiación, el ahogo disecado del ijillo. (Todo el camino del subsuelo es azaroso como el tapiz engusanado de algunas máscaras: el destino resulta ser un camino propicio para la sospecha, un embalsamar puertas continuamente.)

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
© Pintura de Mark Rothko, 

martes, 17 de diciembre de 2019

LLUVIA DE AQUELLOS DÍAS

Imagen Pinterest





LLUVIA DE AQUELLOS DÍAS




Tus ojos eran mojados por la lluvia de aquellos días en Marylhurst. Nosotros jugábamos en silencio con las gotas de nieve: siempre se afanaba la niebla en ocultarnos, aun en medio de la penumbra, nada era inmóvil en las pupilas. Torpes, ambos, nos dejábamos escuchar a conveniencia. Solos, nos atábamos a la medianoche del lenguaje y al candor de la cajita de música del deseo. Así de improviso, la escarcha de sangre del invierno y su desorden infinito. Después, la espuma entibiada sobre el césped de ámbar de los encajes. Ahora, ante los rasguños de la memoria, pienso que no alcanzaron a estirarse los dedos de los sueños.

Del libro: “Metáfora del desequilibrio”, 2019
©André Cruchaga
©Imagen Pinterest

lunes, 16 de diciembre de 2019

A IMAGEN DEL SUEÑO

©Imagen: https://es.dreamstime.com






A IMAGEN DEL SUEÑO




A Cándida Pedersen




Sabe leer en silencio el lenguaje que revelan los jardines: una extraña luz de deseos afelpa el pecho y aquel horizonte confeso de cometa en la punta del cierzo. Desde la distancia, la lluvia moja los sueños con su ojo de mirlo en la rama de los árboles. A menudo el bosque se torna inhabitable con su espesa niebla e inexpresable el frío.

Leo en la caligrafía de los imposibles los raíles del calendario y sus trenes de vasto corazón blanco: algún sueño crece a la orilla de la boca, un sonido de alegría acaricia el eco que propicia la memoria. Callo mientras crece un río de vértigo en plena desnudez.

Crece el horizonte revestido en ese otro sueño que se fusiona en la noche. A ras del pecho, el candor del vuelo, la rosa de hambre encendida frente a la ventana, la rosa del paraíso, solamente.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga
©Imagen: https://es.dreamstime.com

domingo, 15 de diciembre de 2019

IMAGEN DE CALLES DESÉRTICAS

Imagen Pinterest






IMAGEN DE CALLES DESÉRTICAS




Vos, en esa imagen fugaz de las calles desérticas, entre los fetichismos de una violencia que consumimos en nuestro imaginario, algo así como si pasáramos una temporada en el infierno, entre delirios imposibles y trompetas de carcoma cuando nos asalta la noche. (El país, no deja de ser una lágrima extraña en medio de tantas sombras, un río de polvo apretado en el corazón remolcado por grietas.) La vida es un poco ese Sade de las turbulencias infinitas, una indigestión que huele a escombros, o un perfume de pesadillas que incendia el horizonte. Siempre nos resulta atroz esta fiesta suicida del idilio.

Del libro: “Metáfora del desequilibrio”, 2019
©André Cruchaga
©Fotografìa de Dariusz Klimczak

sábado, 14 de diciembre de 2019

BRUMA SOBRANTE

Imagen Pinterest





BRUMA SOBRANTE




Hay días que no tienen razón de ser ni de estar,
sólo de transcurrir y dejar que
otro cielo, distinto aire ocupen el espacio y se colmen,…
Blas de Otero




Vos, como un acordeón mordiendo mis costados:
hundida y despeinada en mi cuaderno, poesía,
mesa del tren desenfundado de las estrellas.
Te veo venir goteando en el paraguas negro del suicidio,
en la resina del ocote, en el aliento de las bujías.
En este prensapapel del césped indescifrable del aforismo.
Vos, pulsante en las interjecciones de mis calamidades,
en la hornilla resguardada por los párpados de la madrugada.
Vos, digo, como un rincón de mi convento,
luminosa y profana y resurrecta, ay, “verbo revelado”.
Ay el sollozo sin afeitar mi garganta, denudo y liberado.
En el ojo del cielo, un desierto de pájaros marca el día.
Gira el día como la rosa cortada de mi tumba.


Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga

viernes, 13 de diciembre de 2019

POSTRER SUICIDIO

Imagen Pinterest





POSTRER SUICIDIO




Debo pensar en los cuerpos que la noche envuelve,
en las calles sin pupilas,
en los pretéritos habitados por el espejismo,
quizás en el trasiego del agua cuando hierve más de lo normal,
cuando toda la historia está marcada por el miedo,
por el tímido claroscuro  del bosque.
Hasta hoy, no sé si los barcos pueden atravesar
las regiones heridas del sueño,
o el torrente almidonado de los pájaros en su escabroso horizonte.
Es posible que nuestros cuerpos se acumulen en el espacio
y luego se liberen en un siglo de gaviotas.
Cuando volvamos a la espiga, habremos acumulado el sudor
en el corazón del ombligo,
el ahogo aquietado entre los encajes desvelados del misterio.
—vos, en el postrer suicidio: viendo la fotografía en la ventana,
las pestañas casi inmóviles, la soledad resuelta en el espejo,
todos los nombres irremediables en el taller entero del silencio.

Del libro: Precariedades, 2019
©André Cruchaga

viernes, 6 de diciembre de 2019

LA AUSENCIA, SIN EMBARGO

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LA AUSENCIA, SIN EMBARGO




Time can bring you down, time can bend your knees
Time can break your heart, have you begging please, begging please
Eric Clapton




Sobre una noche de fosforescencias, la ausencia, sin embargo, marca el hierro de la espera: no hay ala que me libre de la pena, ni otra oscuridad como el frío que se agita en la nada. Al borde de las esquinas del sueño, un acantilado de pañuelos en la respiración, gira ciego y decapitado como una gota en el pavimento. (En la almohada un pedazo de sombra aruña mis recuerdos: en los brazos presiento el río que huye en su desatino. En aquel retraso o demora, la ausencia petrificada de la primavera.)

Del libro: “Metáfora del desequilibrio”, 2019
©André Cruchaga
Imagen Pinterest

martes, 3 de diciembre de 2019

EN LA LUZ QUE SE EXTINGUE

©Pintura de Joan Mitchell







EN LA LUZ QUE SE EXTINGUE



A Enrique Ortiz Aguirre



Música le pidió ayer su albedrío
Luis de Góngora




En la luz que se extingue durante la noche, el ojo del pez desahuciado en la garganta: el circo flotante de una abeja en la ventana, moribunda en su ceguera imantada. Ebrio de viejas sombras, el reino enfurecido de los espíritus junto a aquel incendio de exorcismos. En el ritual de la hojarasca, los calendarios arrugados colgando de las puertas, los espejos de rodillas como extraños jinetes de un galope que se alarga en los féretros. Desde la soga del vinagre, este juego desnudo de los huesos, el incendio apagado de los ataúdes.

Del libro: “Metáfora del desequilibrio”, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Joan Mitchell