domingo, 8 de julio de 2018

MURAL DE ZOPILOTES

Imagen cogida de la red





MURAL DE ZOPILOTES




Vuelo debajo de los murales de grafito: ahí, láminas de zopilotes nocturnos, hacen su posta sin pañales.

En el ovillo de tinta, la asquerosa luz de las greñas de la risa y la herrumbre. (A menudo nos envuelve el abrazo hediondo de la desventura mosqueada por el vejamen. Y también los extraños cascos del chantaje.)

Durante el tableteo de la respiración, el pánico como otro itinerario más de los jardines de la ciudad.

—El país tiene esa virtud de parecerse al cielo.


De “Poemas del descreimiento”, 2018.
© André Cruchaga

martes, 3 de julio de 2018

ESTADO DE ANORMALIDAD

Imagen de la red






ESTADO DE ANORMALIDAD




Prefiero los estados anormales de la cópula para legitimar los vacíos de la esperanza, —ese supuesto refugio irreductible— a transitar sobre los esfínteres del pájaro circuncidado.

A cada boca el sedante de la almohada y su pared inexpugnable.

¡Quien ha encontrado el mejor postor para su alma? (Ya exhausto, se torna legible la agonía, ese vello mordido por el aliento, con la lengua derrumbada en el aullido del diamante.)

Nada es normal cuando la demencia lanza sus alaridos. Las manos confabulan dentro de la grieta y la tormenta decapita la ropa.

Por un momento me tocan los dedos de la fuga: jamás olvidé aquella comezón azucarada; ahora hace frío cuando repaso la historia.


De “Poemas del descreimiento”, 2018.
© André Cruchaga

domingo, 1 de julio de 2018

LA MORT DEL CLOWN

Pere Bessó






LA MORT DEL CLOWN




Para Pere Bessó




Aquí siempre es invierno, o tiempo de canícula y giran alrededor de las ojeras los cadáveres: hablamos de la mort del clown y del rumor de cada página en la que escribimos la tempestad de telegramas de las estatuas.

Ahí, “el espejo que no reverbera”, sino que fornica en el poema hasta pulverizar la materia, o hacer añicos los vacíos.

El poema estremece mientras nos asfixian los estruendos de las criptas, pero tiene su estado de gracia: la postrera lengua de la memoria y su montón de ojos como el otro sueño.

Si hay algo que se multiplica es la lluvia y la nieve del poema. (Aquí está dicho el absoluto y se erige en la plural grieta del alfabeto con su fragor de infinita insurrección.)

La muerte traga en ardiente sigilo los baldíos posesos del ijar.

De “Poemas del descreimiento”, 2018.
© André Cruchaga