viernes, 25 de enero de 2019

OPCIÓN DE VIDA

©Imagen Pinterest






OPCIÓN DE VIDA




Hay historias que se hacen con extravíos: un tren de migraciones se evapora en el aliento. (Al cabo, siempre preferí vivir en el mundo de mis precariedades.)


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga
©Imagen Pinterest

martes, 22 de enero de 2019

IRIDISCENCIA

Imagen cogida de la red





IRIDISCENCIA




De las estanterías del pecho, la caja de música del arcoíris comiéndose los ojos. O el ayuno de mariposas bajando a las entrepiernas. El deseo no aquieta sus mástiles frutales.


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga

domingo, 20 de enero de 2019

CLANDESTINIDAD

©Pintura de Martin Jonhson Headen





CLANDESTINIDAD




Cavamos a golpes el mar de las clandestinidades. Y ahí, forjamos la luz del asombro. Aún recuerdo los riesgos de la incandescencia.


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga
©Pintura de Martin Jonhson Headen

jueves, 17 de enero de 2019

PRIMAVERA DE LA MUERTE

©Fotografía Wynn Bullock





PRIMAVERA DE LA MUERTE




Nos fundimos anticipadamente en el féretro del frío: era fúnebre, sin saberlo,  el coro de cada palabra musitada. En el lecho, la nada exacerbada, sólo comparable a la noche de una lágrima encendida de sombras y declives.


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga
©Fotografía Wynn Bullock

jueves, 10 de enero de 2019

HUELLAS

Imagen Pinterest





HUELLAS




Nos quedan las vestimentas oxidadas, el fermento, acaso de la lluvia abrasada en aquellos lugares de infinita neblina. Nos queda, incluso, aquel candil espinoso en el arado desgarrado del pálpito. Muero de estrecharme entre tus mulos, saber que se me escaldan las manos en tu tórax y que la noche llega como un bisturí a tu abdomen. (Después de tanto ardid, el clímax asoma su hospedaje. Así entendemos que no hay amuletos vitalicios, sino esquirlas en el espejo.)

Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga



lunes, 7 de enero de 2019

MATINADA

Imagen FB de Pere Bessó





MATINADA




Còmplices de l’aroma de la matinada, l’encens de la boira ens respira i mossega i reescriu la llum última de la nit. Ací, de genolls davant del clímax, mai retardat de la rosada en les illades. Els focs es tornen infinits com un cor de cavalls enfebrits: polsa l’ull cremat dels límits la seua història de rails i buits. Al cap, l’aigua de l’hivern ho explica tot: ara desdejunem amb la geografia de la desmesura ja desproveïda de la tutela de la penombra. (De tornada a l’hostalatge, ens reconeixem en la remor de la fusta: davant de la finestra, l’ascensió dels pins i una cistella d’ocells i la verdor fermentada del diluvi.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




MADRUGADA




Cómplices del aroma de la madrugada, el incienso de la niebla nos respira y muerde y reescribe, la luz última de la noche. Ahí, de rodillas frente al clímax, nunca retrasado del rocío en los ijares. Los fuegos se tornan infinitos como un coro de caballos afiebrados: pulsa el ojo quemado de los límites su historia de rieles y vacíos. Al cabo, el agua del invierno lo explica todo: ahora desayunamos junto a la geografía de la desmesura ya desprovista de la tutela de la penumbra. (De vuelta al hospedaje, nos reconocemos en el rumor de la madera: frente a la ventana, la ascensión de los pinos y una canasta de pájaros y el verdor fermentado del diluvio.)

Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga

ENTREMÉS

Imagen FB de Pere Bessó





ENTREMÉS




Abans d’arribar a l’abadia, el somni de qui mamprén un llarg viatge a través de l’absolut. Prèviament a la ventada, l’aprenentatge de l’aroma, el sigil de la set incontenible. Després, la clara floració de l’efímer, o aquesta agraïda eternitat de la memòria en la terra. 

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




ENTREMÉS




Antes de llegar a la abadía, el sueño de quien emprende un largo viaje a través del absoluto. Previo al ventarrón, el aprendizaje del aroma, el sigilo de la sed incontenible. Después, la clara floración de lo efímero, o esa agradecida eternidad de la memoria en la tierra.

Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga

domingo, 6 de enero de 2019

OPÚSCULO






OPÚSCULO




En el libro de la espera, las noches de otoño a punto de ser metal más allá del sonido de la bruma, o simple opúsculo de la hojarasca. En el más acá, el infierno de Dante y su escombro de ventana de tile. En el ojal del cielo, la gota de piedra de la profecías agonizantes. (Nada queda cuando han muerto las distancias, salvo la hediondez del cofre milenario de la polilla. En el rostro ciego, las grietas del rocío en una armónica de carcoma.)

Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga

viernes, 4 de enero de 2019

STARBUCKS







STARBUCKS




Entre el artificio alado de los cuervos, un Starbucks con sus luces moribundas y ese olor a condensado abismo. Sobre la Briggsmore Ave., aquel amarillo flemático de las luciérnagas y un bar en las esquinas del subconsciente al punto de dispersar los párpados. Luego las cavilaciones de los días lluviosas que se desmoronan. Algo sucedió que las imágenes empezaron a hacerse perpetuo tatuaje.


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga

martes, 1 de enero de 2019

QUEMADURA








QUEMADURA




Ahí, en Tuolumne river, las demasías del tiempo consumiendo la propia sobrevivencia. Se oyen los parpadeos sordos del agua y el ardimiento feroz de los pedernales.


Del libro “Paradise road”, 2019
©André Cruchaga
Fuente de imagen: culturacolectiva.com