Imagen cogida de:es.123rf.com
AMANECER
Como una boca diáfana, este
amanecer enrojecido del incienso.
Desde la distancia, el ojo dócil del
sendero bautismal. Así, en las nacientes
raíces de las hojas, la
consagración de las puertas congregadas
en el unísono de los sentidos.
(Nunca desaparece la luz cuando en el semblante hay querencia de
ventanas,
cuando el amanecer es ese paraguas de todos los días.)
Nada resulta inanimado incluyendo
mis torpezas. Todo es pira más allá
de mi demencia: yo atesoro los
colores para mi próximo poema.
Cada sobresalto revela el tiempo
justo de las sienes.
Sin artificios el alma en el
fuego, el ojo en presencia del día.
Barataria, 04.VIII.2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario