Imagen
cogida de Printerest
DESTIEMPO
El charco de negrura en la sonrisa
puede tanto como los agujeros del ojal del ladrido en mis sienes amortajadas de
carcoma: crecen los pétalos entrecerrados de la rosa a despecho del último
pálpito del tiempo el fregadero de cucharas no siempre sirve para lavar el
aliento ni soltar una lágrima sobre los anteojos a destiempo la escama de los
barrotes en las sombras o la ventana postrera colgada de mis torceduras siempre
los retumbos del tiempo nos doblan las rodillas allí uno frente a los colmillos
de la noche sin ningún salvoconducto a uno se le nublan los ojos con hollinosos
paisajes de disfraces a veces el fuego es sólo otro desuso de las semanas o la
sobremesa de los esqueletos de la oscuridad siempre palpables en mis
amarillentos silencios…
Barataria,
22.I.2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario