miércoles, 7 de agosto de 2019

EN UN PRINCIPIO TUS LABIOS

Imagen Pinterest





EN UN PRINCIPIO TUS LABIOS




En un principio tus labios detenidos en los relámpagos rojos
del cierzo en el litoral dulce del absoluto
(bien lo sabía en tu mirada ofrecida en mi pecho de felicidad)
Era siempre como la lluvia primera reunida e intacta en la persiana
de aquel oficio de lluvia irrestañable
Sobre aquellas veredas la madera de nuestros cuerpos el cáliz
de tu sexo invocando el alba los portales colmados de pájaros
la promesa resplandeciente de tu danza venturosa de sonidos
la humedad rural de nuestras ventanas
En un principio lo supimos la demencia naciente de los ojos
en medio de la brisa la luz del pan y el pez de las manos suave
sobre tus pechos azules gigantesco como un salmo
(pero el país nos volvió oscuros razonablemente oscuros
en la mesa oscuros como el mimbre soles de un libro de ceniza.)


Del libro: Metáfora del desequilibrio”, 2019
©André Cruchaga

No hay comentarios: