Páginas

viernes, 26 de octubre de 2012

DESPEDIMIENTO

Fotografía Lázaro Aguirre




DESPEDIMIENTO




Guardo este paraguas de alfileres en la envoltura del techo de la ceniza por si en el desván solo caen monedas resignadas monedas de sueño los renunciamientos a la ahora del nosotros las cucharas emboscadas por la muerte estos locos días convocados por el subsuelo de los cristales por la campana invertida debajo del silencio ahora elijo entre bocanadas de herrumbre puñales de irreverente lepra por donde avanza el traje flotante de las turbias urdimbres de la hoguera  no es rareza volver a la aridez de los nombres esdrújulos ni a este mudo concierto de máscaras: enumerar los días sin solfa sudar la constancia de los guijarros morder de pronto las puertas corredizas de las promesas sin que emerja el semblante del sonambulismo: las muertes diarias que uno retrata en los sueños en cuyas manos se obstina lo ilusorio me quedo aquí con brazadas de agua consumida y el lamento de la madera en el serrucho y el tímido pan cerca de mi boca alejándose de la ráfaga de toda puerta por donde despunta el viento me despido en lo posible de la geografía de los trenes de esta lluvia de ataúdes en ráfagas: cuando quise la mesa llena entraron de madrugada los acordeones de la sal y una proa de astillas rompió la fragancia y cuando todo pasa o sucede también se queman los dientes de las indecisiones la pústula de los aromas rotos la fascinación por la piedra pómez o el simple golpeteo de las telarañas de pronto lo sabía: cuando las sombras cobran vida solo nos queda la existencia de la ausencia la hostilidad de las sartenes el frío en la calle que nunca cambia de pañales o el presente resbaladizo de las aguas pero es que siempre lo supuse: entonces ya no queda ninguna hazaña súbita ni aquel inmóvil bosque sacudido ni aquel anillo en movimiento de las embarcaciones ni aquella condición de construir el futuro ¿habrá otros minutos sin hachas? En la bodega de los zapatos sin embargo el aguacero otra tinta cavando en el cuaderno otras noches débiles atroces coces del grito sobre la montura del aliento así respondo y me despido y qué importa si es entre los fósforos mojados de la intemperie si en lo profundo hay arraigo de puertos y astilleros

Barataria, 18.X.2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario