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domingo, 9 de julio de 2017

DOBLECES DE CONCIENCIA

Pintura de Wassily Kandinsky - "Quiet Harmony", 1924. 
Cogida de Printerest.





DOBLECES DE CONCIENCIA




Todo permanece en equilibrio hasta que se rompen los límites visibles de las bicicletas o esos espacios donde sestea el tiempo: en el cáliz negro del carbón la sumisión ensangrentada de las colillas y el ronroneo último del humo como si se tratase de una sed interminable voy arrimado a los rincones de los andenes acostumbrado a dormir en la última hora del agua turbia de los jeroglíficos a veces es extraño el tránsito desordenado de las hormigas lamer las grietas de los deseos fenecidos permanecer menesterosamente en los tropiezos siempre la fetidez resulta infame en todas partes yo feliz de vomitar lo estrafalario de los maniqueísmos el acecho que olvida las palabras dulces la falsa comodidad del taburete la ventana del presente con todas sus melancolías yo cuerdo de voces sediciosas de certidumbres destronadas del reino de lo creíble basta de dobleces de conciencia (me digo) dentro del disfraz eran exhaustos los mingitorios las sucias heridas sin cauterizar: no soy objeto sexual ni bisutería ni hostia ni boca para ensalivar plegarias de oscura geografía soy ciego hasta donde me es posible ver el horizonte alrededor el amor no deja también de ser una amenaza para la claridad claro en el lecho flamean los cuerpos tal vez porque la desnudez es otra manera de ver al país entre zarpazos y extrañas quejas después uno sólo procura sobrevivir aun con la yugular rota con todo el luto mudo de las noches con todo el odio que se lleva en el pecho siempre supe de los dientes tardíos anudados al disimulo pero claro cada dentellada es una nueva escuela supongo que el disfraz tiene algo de suicida o en todo caso al final es pútrida sustancia de un río de callejones sin nombre valgan después de todo  los pespuntes o el hilván para el olvido: ciertos juegos estorban el aliento ciertos portafolios inmundos de falsos equilibristas en fin espero que la lluvia haga su trabajo y la limpia borre los extravíos (no es milagro este brasero de sombras solo la noche y su dolor de carne)
Barataria, 2017

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